La muerte… ese “ser” que para algunos existe sin carne pero con huesos… ¿Estamos seguros de que existe? ¿Y porque la muerte es lo contrario que la vida… si la vida es dios la muerte quien es… su enemigo? ¿Pero no era el demonio el cual representa el mal? ¿Qué pasa después de morir? Está claro que no escribiré más… quizás desde el cielo…. Quizás desde las zarpas de un tigre o las extremidades de una hormiga… quizás vaya a ese sitio tan calentito en el que siempre huele a hamburguesa… aunque eso es otra pregunta. Si el cielo existe y está por encima de las nubes... ¿Por qué no lo vemos? En cambio el infierno no podemos demostrar nada… no podemos meternos en un volcán y decir: ¿Hay alguien ahí? Pero quizás no vayamos a ninguno de estos sitios… ¿Y sí nos quedásemos aquí? No tengo ni idea… pero eso si… si en el “Nirvana” se encuentra ese grupo… no me importaría quedarme allí.
Veréis, desde la filosofía la muerte es algo infinito, porque una vez muerto no hay nada; aunque también podríamos tomarlo como algo transitivo, lo cual implicaría algo superior, el alma. Cuando decimos que la muerte es algo infinito también debemos de decir que la muerte es sobrehumana y no se puede controlar, por tanto todo morirá o todos moriremos algún día y sí, tú también morirás; Es incondicionada, lo que quiere decir que no cumple condiciones, es solamente: mueres o no mueres, no hay más estados. Y también independiente (por hacer el chiste… diríamos que trabaja mejor sola), que es que a cada uno nos llega de una manera distinta en un momento distinto (aun en una explosión de una bomba atómica que matara a 10 personas a la vez en el mismo instante y estas se colocaran a un radio de la bomba de un metro, todas las muertes serian distintas, ya que se encuentran en puntos distinto y puede que a cada una le estallara algo antes que a los demás y viceversa en el conjunto de personas).
Claramente usted y yo sabemos que nadie sabe lo que hay detrás de la muerte (ni siquiera aquellos que han vuelto de ella) pero hay varias concepciones dentro del absolutismo. Tenemos el Panteísmo que es la comparación de Dios con la naturaleza. Este tipo de creencia es muy primitiva, y de ello tenemos muestra de que nuestros… antepasadisimos tenían pinturas en retales o en las “casas” dibujos de “Dioses” de la naturaleza como el agua, el fuego, el trueno y demás. Aparte de estos dibujos se han encontrado pequeñas figuras, las cuales servían de culto. Después tenemos el teísmo, que es que el Dios (indiferentemente de la religión) Es el creador del cielo, de la tierra, de la vida y demás, pero… La vida pudo no haber sido creada por él… y a ver nacido de la mano de una atmosfera altamente reductora, materia orgánica, grandes temperaturas, rayos eléctricos y cometas provenientes del espacio… quizás todo ello creó la vida. Pero como no lo sabemos y aun así es una teoría… así que agárrate a lo que prefieras. Para finalizar tendríamos lo que sería el Deísmo que es trascendente… que es que existe un dios… pero para nada sabes quién, hombre o mujer, mayor o joven, etc.
Digamos que para acceder a una reencarnación o a un paraíso divino el ser humano elige ser teísta si acepta y cree en la existencia de dios, también puede rechazar y negar su existencia (aun así… digamos que si existe aunque él no lo quiera, acabaría pasándole algo); y finalmente la agnóstica que son esas personas que dudan de la existencia. Pero realmente… solamente la esquematizamos y las separamos, les ponemos leyes, normas, compromisos, imágenes, ídolos, canticos, reverencias, cultos y todo ello… ¿Por qué? Bueno pues se cree que lo más global sería la antigüedad. Sí, la antigüedad. En la antigüedad se pensaba en maldiciones, en la mala suerte, profecías, pero sobre todo en fuerzas naturales. Estas fuerzas naturales necesitaban un motivo, un algo que los provocara, ¿Pero qué? Pues algo más que humano, algo sobre humano… ¿Un semidiós como Hércules? No, eso no haría nada, pero si un Dios… Pero si yo tengo mi Dios… ¿Por qué no ibas a tener tú el tuyo? En ese momento empezaron a crear Dioses de esto del lo otro, benevolentes, sabios, justos aunque algunos poco tolerantes, crueles y despiadados. Los había de todas las formas… pero poco a poco fueron cayendo y así se empezaron a formar las religiones. Todas crecidas desde una base hasta llegar a las de hoy en día. Las principales… pues la Hinduismo, el Budismo, el Cristianismo, el Judaísmo y el Islamismo. Todas distintas unas de otras… con distinto Dios… con distintas formas de llevar la religión… pero todas con el mismo fin, resolver, justificar y mitigar las peticiones de las personas que los imploran, también intentan resolver, justificar y mitigar las preguntas y sucesos que no somos capaces de explicar a partir de un método científico.
Aunque parezca que nos hemos alejado del sentido del texto, la muerte, solamente hemos explicado su primer paso, con el cual lo siguiente no tendría sentido. Lo que hemos hecho es la puerta, las distintas puertas por las cuales se pueden pasar, pero todas llevan a lo mismo:
Una vez de muertos que hacemos… Si no crees en ningún Dios, solamente te espera la inexistencia, el camino entre la muerte primaria, la vida y la muerte secundaria. Si crees que hay un dios pero que no sabes su forma… tu vida correría un cierto peligro dependiendo de cómo es ese dios… Si es bueno y te tiene un pastel preparado en una terraza de una cabaña a los pies de una playa la verdad merecería creer en él en el último instante… por el contrario si lo que te espera es… algún tipo de ser ya sea humano o no con látigos de cuero y pinchos por doquier… mi mejor consejo seria poder olvidar eso y no pensar en nada, así conseguirás llegar a ella, a la inexistencia como ya se dijo antes. Finalmente los que creen en dios… todos ellos tienen una “salvación”. Podemos diferenciar el cuerpo, que es lo que se queda aquí, el bien material. Y el alma… nuestro yo interno, lo que nos impulsa a actuar como actuamos y el que nos impulsa a pensar como pensamos. Es la separación de estas dos mitades. En una religión vuelves a nacer convertido en algún animal o quizás en algún humano. En otras quedas vagando libre por la tierra si no tienes la consciencia tranquila y por tanto eres un ser de sombra translucida… al menos que si que la tengas tranquila y vayas hacia la luz, que según los que han vuelto de allí es como un túnel, o es como si flotaras y en otros casos como si calleras. También puedes esperar en este mundo y no pasar a otro sino esperar tu turno y volver a vivir… pero sin recuerdos de la otra vida. Y todo esto… ¿Para qué? Pues para explicar el miedo más grande… que puede que ahora no lo sientas… o puede que sí. Pero definitivamente lo llegaras a tener, y no serás capaz de dominarlo. Sera un venir y no marchar, será el miedo. Sí, miedo. Un día se apodera de tu vida y te deja la nota: dentro de poco se pasara una amiga. El miedo es el potencial primordial de la vida por lo que se mueve el mundo, por lo que se han creado guerras y conflictos, por el que se dispararon balas para que la persona fallecida no hablara y contase lo que debería haber contado. Es la muerte el motivo de la vida y aunque lo creas o no, sin saber el motivo de esta, la aprecias, te aferras a ella y no la quieres perder. Y por ello también creas religiones o las sigues para no terminar enterrado, calcinado, devorado, congelado, pero sobretodo para no acabar olvidado y no perder lo que más aprecias, no tu vida, sino la de los demás por eso crees que volverás a renacer en otro yo, en otro animal, o seguirás tu vida en el cielo y veras a los que antes de ti, han estado muerto y los próximos te verán a ti y así continuareis vuestras vidas.
“Creas una puerta, crees en una puerta con un final. Porque, aunque la muerte te coja de la mano y te haga cruzar, tu no quieres.”
