lunes, 7 de diciembre de 2009

10 Historias de Lágrimas

·No llores cuando me muera, porque ninguna lágrima tuya podrá hacer volver a despertar, pero tampoco apagarán el amor que siento por ti.

·Lagrimas de sangre caen por el rostro de aquel ángel que una vez te vio morir.

·Si te sientas y escuchas atentamente en la oscura, fría e insólita noche como cae la pesada, lenta y cristalina lluvia, oirás estés donde estés, el sonido de mis lágrimas escapándose de mis manos y golpeando el duro suelo, por saber que te has ido de mi lado.

·Una tragicomedia, solo es la representación de la de alguien. En la cual su desgracia es nuestra risa, y sus risas nuestras lagrimas.

·Una lágrima de amor sincero a la luz de la luna es capaz de brillar más que el más reluciente y puro de los diamantes.

·Jamás querré ver un arcoíris dibujado en tu cara.

·Nada provoca más lágrimas que ver el atardecer de tu vida con la luna a su vera.

·Una vez se dijo: “Una gota de agua en el futuro, costará igual que una de petróleo”. Yo no estoy de acuerdo. Porque… ¿Cuanto valdrá una sola lagrima tuya?

·Me acuerdo que cuando era pequeño creía que llovía por que Dios estaba triste. Así que, alegra esa cara, que no quiero que llueva más.

·Una vez, que me encontraba yo vagando solo por la soledad de un parque, vi a la muerte sentada en un banco, llorando. Entonces me acerque y le pregunte que le pasaba, me respondió que lloraba por culpa de su trabajo. Le insiste de nuevo y se decidió a contármelo: Me contó odiaba su trabajo, que siempre pasaba lo mismo. No era matar y segar la vida de las personas, sino, que se enamoraba muchas veces, pero nunca ha podido amar. Siempre ha podido ver la vida de la otra persona como si fuera un video, como si tuviera un cristal que no le dejara pasar.

Entonces volvió a llorar y desapareció.

Pero antes de eso, me dijo, que siempre le pasaría lo mismo: vería el amor pero nunca lo saborearía.

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